lunes, 13 de diciembre de 2010

“18 NO HAY TEMOR DE DIOS DELANTE DE SUS OJOS.”. Dice el Señor en Romanos cap. 3 verso 18.


He aquí una descripción exacta de todo ser humano que ha nacido después de la Rebeldía y Desobediencia de Adán y Eva, con excepción de nuestro Señor Jesucristo, el cual era Dios Encarnado en la persona del Hijo; como se nos confirma en Filipenses cap. 2 versos 5 al 7, y Colosenses cap. 1 verso 15 al 17: “5 Haya, pues, en ustedes este sentir que hubo también en CRISTO JESÚS, 6 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, 7 sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; 15 Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. 16 porque en Él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de Él y para Él. 17 y Él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en Él subsisten;”.

El ser humano por naturaleza No Teme a Dios; su naturaleza pecadora lo lleva a Rebelarse contra Él desde que es niño. Por eso, a ningún niño hay que enseñarle a hacer rabietas, iras y pataleos; él las hace por sí mismo. Tampoco hay que enseñarle a mentir, a pelear y a justificar su mala conducta; ellos lo hacen de forma natural y espontanea. Por eso es que Dios da la siguiente sentencia en Salmos cap. 58 versos 3 al 5: “3 Se apartaron los impíos desde la matriz; Se descarriaron hablando mentira desde que nacieron. 4 Veneno tienen como veneno de serpiente; Son como el áspid sordo que cierra su oído, 5 Que no oye la voz de los que encantan, Por más hábil que el encantador sea.”.

Y es, porque el ser humano por naturaleza no teme a Dios, que éste actúa tan pecaminosa y perversamente, llegando algunos a tal extremo, de cometer actos de seres irracionales, anormales y carente de sano juicio, como cuando un varón desea y tiene intimidad con otro varón, y una hembra con otra hembra: “26 por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza, 27 y de igual modo también los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se encendieron en su lascivia unos con otros, cometiendo hechos vergonzosos hombres con hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución debida a su extravío. ” dice el Señor en Romanos cap. 1 versos 26 y 27.

Y Es por esa misma naturaleza pecaminosa con la que Todo ser Humano Nace que hace que este esté: “29 estando llenos de toda injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades; 30 murmuradores, detractores, aborrecedores de dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres, 31 necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia; 32 quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican.” dice el Señor en Romanos cap. 1 versos 29 al 32.

Y es por esta misma naturaleza pecaminosa, que muchos seres humanos confunden el temor a Dios con pertenecer a un grupo religioso o seguir algunos principios o reglas de moralidad y cívica, su propio engañoso corazón le desvía; como lo confirma el señor en jeremías cap. 17 verso 9: “9 Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá? 10 Yo el SEÑOR, que escudriño la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras.”.

Dios dice, que Él no acepta su servicio ni adoración, porque sólo lo pueden hacer con su boca, pero en su comportamiento pecaminoso, siguen siendo los mismos; por eso Dios, refiriéndose a este tipo de personas, dice en mateo cap. 15 versos 7 al 9: “7 Hipócritas, bien profetizó de ustedes Isaías, cuando dijo: 8 Este pueblo de labios me honra; mas su corazón está lejos de mí. 9 pues en vano me honran, enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres.
Dios les dice que pierden su tiempo queriendo adorarle a su manera. Y todavía es más drástico, al decirles: “10 Príncipes de Sodoma, oíd la palabra del SEÑOR; escuchad la ley de nuestro Dios, pueblo de Gomorra. 11 ¿para qué me sirve, dice el SEÑOR, la multitud de vuestros sacrificios? hastiado estoy de holocaustos de carneros y de sebo de animales gordos; no quiero sangre de bueyes, ni de ovejas, ni de machos cabríos. 12 ¿Quién demanda esto de sus manos, cuando vienen a presentarse delante de mí para hollar mis atrios? 13 No me traigans más vana ofrenda; el incienso me es abominación; luna nueva y día de reposo, el convocar asambleas, no lo puedo sufrir; son iniquidad vuestras fiestas solemnes. 14 Sus lunas nuevas y vuestras fiestas solemnes las tiene aborrecidas mi alma; me son gravosas; cansado estoy de soportarlas.15 cuando extiendan sus manos, yo esconderé de ustedes mis ojos; asimismo cuando multipliquenla oración, yo no oiré; llenas están de sangre sus manos.” dice el Señor en Isaías cap. 1 versos 10 al 15.

Y es, porque el ser humano, por naturaleza no le teme, que Dios le ha apartado de Él, mientras permanezca en esta situación; como el Señor lo Confirma en Romanos cap. 3 versos 22 y 23, y en Isaías cap. 59 versos 2 y 3:” 22 ... porque no hay diferencia, 23 por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,  2 pero sus iniquidades han hecho división entre ustedes y su Dios, y sus pecados han hecho ocultar de ustedes su rostro para no oír. 3 Porque sus manos están contaminadas de sangre, y sus dedos de iniquidad; sus labios pronuncian mentira, habla maldad su lengua.

Cuando el ser humano no tiene temor a Dios, el Señor se encarga de que nunca tenga verdadera Paz, Sosiego y Tranquilidad; como Él lo confirma en Isaías cap. 57 verso 21: “21 No hay paz, dijo mi Dios, para los impíos.”. Y no solo Dios se encarga de que no tenga paz, sino que lo llena de calamidades, aún en sus aparentes éxitos profesionales, políticos, económicos, militares o faranduleros; como Él lo confirma en Salmos 11 verso 6: “6 Sobre los malos hará llover calamidades; fuego, azufre y viento abrasador será la porción del cáliz de ellos.

Sin embargo, en este día, si estás dentro del grupo de los que no temen a Dios, tienes la oportunidad de pertenecer al grupo de los que temen a Dios; aunque en ti mismo no hay nada que te merezca dicha oportunidad, Dios en su Gran Misericordia te la ofrece; como Él lo confirma en Romanos cap. 9 versos 15 Y 16: “15 Pues a Moisés dice: Tendré misericordia del que yo tenga misericordia, y me compadeceré del que yo me compadezca. 16 Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia.

¿Qué Debes de hacer, entonces, para pertenecer al Privilegiado Grupo de los que Temen a Dios?

Primero: Clámale al Señor, que tenga misericordia de ti, por el Gran Mediador e Intercesor, el Señor Jesucristo:24 Porque no entró CRISTO en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios; 16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.” dice el Señor en Hebreos cap. 9 verso 24, y cap. 4 verso 16.

Segundo: Pídele que Cambie ese Corazón Insensible que tienes, que no te permite Oír la Voz de Dios para Obedecerla, y que Ponga su Temor en ti:26 Les daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de ustedes; y quitaré de su carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. 27 y pondré dentro de ustedes mi espíritu, y haré que anden en mis estatutos, y guarden mis preceptos, y los pongan por obra. dice el Señor en Jeremías cap. 36 versos 26 y 27.

Tercero: Arrepiéntete de los pecados que has cometido, y Apártate para siempre de ellos:13 el que encubre sus pecados no prosperará; mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.” dice el Señor en Proverbios cap. 28 verso 13.

Cuarto: Humíllate ante el Señor, y Pídele que Dios Espíritu Santo venga y te Liberte de tu naturaleza pecaminosa, que hace que tu no temas a Dios, para que puedas temerle Libre y Voluntariamente:34 JESÚS les respondió: De cierto, de cierto les digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. 36 Así que, si el hijo les libertare, serán verdaderamente libres. 2 Mi mano hizo todas estas cosas, y así todas estas cosas fueron, dice el SEÑOR; pero miraré a aquel que es pobre y humilde de espíritu, y que tiembla a mi palabra.” dice el Señor en Juan cap. 8 versos 34 y 36, e Isaías cap. 66 verso 2.

Quinto: Pon tu Confianza Únicamente en Jesucristo, para ser Librado de castigo que mereces, de la Ira de Dios y de su Juicio:17 Porque no envió Dios a su HIJO al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por Él. 18 El que en Él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito hijo de Dios. 36 El que cree en el HIJO tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el HIJO no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.” dice el Señor en Juan cap. 3 versos 17, 18 y 36.

¡Que el Dios Todopoderoso, quiera Partir tu corazón de Piedra, y Ponga en ti, un corazón Sensible a su Palabra, para que Puedas Temerle por toda la eternidad!

miércoles, 8 de diciembre de 2010

“20 Al SEÑOR tu Dios temerás…”. Dice el Señor en Deuteronomio cap. 6 verso 13.

Dios, el Señor y Único Soberano, Manda a todo ser humano que al Único Ser al que Deben Temer, y están Obligados a Temer, es a Él.

Es ese Temor a Dios que Debe Regular y Dirigir la Vida Diaria de Todo Ser Humano. En su Hogar, en su Trabajo, en su centro de Estudios y las relaciones con los demás: como Manda el Señor en 1ra. de Pedro cap. 1 versos 14 al 17: “14 Como hijos obedientes, no se conformen a los deseos que antes tenían estando en su ignorancia; 15 sino, como Aquel que les llamó es Santo, sean también ustedes santos en toda su manera de vivir; 16 porque escrito está: Sed santos, porque yo soy Santo. 17 Y si invocan por Padre a Aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, condúzcanse en temor todo el tiempo de su peregrinación.

Es ese Temor a Dios que Debe hacer que si soy Esposo, no Golpee a mi esposa, ni la trate con dureza, con abusos, ni con desconsideración; como Manda el Señor en 1ra. de Pedro cap. 3 verso 7, y en Efesios cap. 5 verso 25: “7 Ustedes, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que sus oraciones no tengan estorbo. 25 Maridos, amad a sus mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó así mismo por ella.

Es ese Temor a Dios que Debe hacer que si soy Esposa, me Someta voluntaria y gustosamente al gobierno y dirección de mi Marido, y aleje de mi, esa actitud pecaminosa de ser Respondona, Contradictoria y Rebelde; como Manda el Señor en Efesios cap. 5 versos 22 y 24: “22 Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor; 24 Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo.

Es ese Temor a Dios que Debe hacer que Críe a mis hijos, conforme a las instrucciones que el Señor Manda en su Santísima Palabra, y no conforme a mis opiniones u opiniones de otros; como Manda el Señor en Efesios cap. 6 verso 4: “4 Y ustedes, padres, no provoquen a ira a vuestros hijos, sino críenlos  en disciplina y amonestación del Señor.

Es ese Temor a Dios que Debe hacer que si Soy hijo me Someta Obediente a los mandatos, enseñanzas, correcciones e instrucciones de mis padres, sin rebelarme, sin poner mala cara, sin discutir y sin refunfuñar; como Manda el Señor en Efesios cap. 6 versos 1 al 3: “Hijos, obedezcan en el Señor a sus padres, porque esto es justo. 2 Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; 3 para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra”.

Es ese Temor a Dios que me lleva hacer un Buen Vecino, y estar dispuesto a ayudar y contribuir en lo que pueda con los demás; como Manda el Señor en Proverbios cap. 3 versos 27 al 29: “27 No te niegues a hacer el bien a quien es debido, Cuando tuvieres poder para hacerlo. 28 No digas a tu prójimo: Anda, y vuelve, Y mañana te daré, Cuando tienes contigo qué darle. 29 No intentes mal contra tu prójimo que habita confiado junto a ti.

Es ese Temor a Dios que Debe hacer que si soy Comerciante, no Engañe a mis clientes, con la calidad de mis productos o servicios, ni con la cantidad ni con el peso; como Manda el Señor en Proverbios cap. 16 verso 11, cap. 20 verso 23, en Levítico cap. 19 verso 36, y en Deuteronomio cap. 25 versos 15 y 16: “11 Peso y balanzas justas son del SEÑOR; Obra suya son todas las pesas de la bolsa. 23 Abominación son al SEÑOR las pesas falsas, Y la balanza falsa no es buena. 36 Balanzas justas, pesas justas y medidas justas tendréis. Yo el SEÑOR su Dios, que les saqué de la tierra de Egipto. 15 Pesa exacta y justa tendrás; efa cabal y justo tendrás, para que tus días sean prolongados sobre la tierra que el SEÑOR tu Dios te da. 16 Porque abominación es al SEÑOR tu Dios cualquiera que hace esto, y cualquiera que hace injusticia.


Es Ese Temor a Dios que Debe hacer que si soy Empleador de otros o Empresario, No le retenga el salario o el sueldo al empleado, sino que le pague lo justo, y en la fecha que éste lo espera; como dice el Señor en Deuteronomio cap. 24 versos 14 y 15: “14 No oprimirás al trabajador pobre y menesteroso, ya sea de tus hermanos o de los extranjeros que habitan en tu tierra dentro de tus ciudades. 15 En su día le darás su paga, y no se pondrá el sol sin dárselo; pues es pobre, y con él sustenta su vida; para que no clame contra ti a Jehová, y sea en ti pecado.

Es ese Temor a Dios que Debe hacer que si soy Empleado, No barajé o pierda tiempo innecesario en otras cosas, que no sean propios del trabajo por el cual se me está pagando; ni que haga el trabajo con descuido, con quejas y con mala disposición; como dice el Señor en Efesios cap. 6 versos 5 al 8: “5 Siervos, obedezcan a sus amos terrenales con temor y temblor, con sencillez de su corazón, como a Cristo; 6 no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino como siervos de Cristo, de corazón haciendo la voluntad de Dios; 7 sirviendo de buena voluntad, como al Señor y no a los hombres, 8 sabiendo que el bien que cada uno haga, ése recibirá del Señor, sea siervo o sea libre.

Es ese Temor a Dios que Debe hacer que si soy Juez, no tomar soborno ni juzgar con ligereza; que si soy policía o guardia, no extorsionar ni inventar expediente judicial contra otros; que si soy autoridad gubernamental, sin importar mi nivel jerárquico, no tomar en dinero que no me pertenece, no engañar con obras sobrevaluadas, no disfrazar los gastos personales con gastos institucionales, no abusar de mi autoridad sobre otros; como dice el Señor en Éxodo cap. 23 versos 2, 3, 6 al 8, en Levítico cap. 19 verso 35, y en Deuteronomio cap. 25 verso 1: “2 No seguirás a los muchos para hacer mal, ni responderás en litigio inclinándote a los más para hacer agravios; 3 ni al pobre distinguirás en su causa. 6 No pervertirás el derecho de tu mendigo en su pleito. 7 De palabra de mentira te alejarás, y no matarás al inocente y justo; porque yo no justificaré al impío. 8 No recibirás presente; porque el presente ciega a los que ven, y pervierte las palabras de los justos. 35 No hagáis injusticia en juicio, en medida de tierra, en peso ni en otra medida. 1 Si hubiere pleito entre algunos, y acudieren al tribunal para que los jueces los juzguen, éstos absolverán al justo, y condenarán al culpable.

En fin, es ese Temor a Dios, que Debe Regular, Dirigir y Controlar, Todos los aspectos de la vida diaria del ser humano.
Y, ¿Qué es el Temor a Dios?
Es ese miedo interno, que se manifiesta en el exterior, y me hace tener siempre presente, el No Transgredir ni Violar ninguno de los Mandatos de Dios, por las Consecuencias que Él ha dicho que Vendrían sobre mí.

Por esta causa es, que luego de Dios Mandar a ser humano que le Tema, añade en el verso 15 del mismo Deuteronomio cap. 6: “15 porque el Dios celoso, el SEÑOR tu Dios, en medio de ti está; para que no se inflame el furor del SEÑOR tu Dios contra ti, y te destruya de sobre la tierra.”. Es decir, si te conduces sin Temor a Mí, dice el Señor, te Destruiré en mi Furor.

Ahora bien, ¿Por qué Debemos Temer única y exclusivamente a Dios?
Primero: Porque El tiene el Poder en sus manos de Enfermar y de sanar nuestros cuerpos: Como Dios lo Confirma en Deuteronomio cap. 32 verso 39:39 Vean ahora que Yo, Yo Soy, y no hay dioses conmigo; Yo hago morir, y yo hago vivir; Yo hiero, y yo sano; Y no hay quien pueda librar de mi mano.”
Segundo: Porque El tiene el Poder de Matarnos y de Resucitarnos: Como Dios lo Confirma en Deuteronomio cap. 32 verso 39:39 Vean ahora que Yo, Yo Soy, y no hay dioses conmigo; Yo hago morir, y yo hago vivir; Yo hiero, y yo sano; Y no hay quien pueda librar de mi mano.
Tercero: Porque El tiene el Poder de Expulsarnos al Lago de Fuego y Azufre o Infierno Eterno: Como Dios lo Confirma en Lucas cap. 12 verso 4 y 5:4 Mas les digo, amigos míos: No teman a los que matan el cuerpo, y después nada más pueden hacer. 5 Pero les enseñaré a quién Deben Temer: TEMAN a AQUEL que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno; sí, les digo, a éste TEMAN.
Cuarto: Porque no hay quien pueda enfrentarse con Él, y salir airoso: Como Dios lo Confirma en Isaías cap. 43 versos 11 y 13:11 Yo, yo el SEÑOR, y fuera de mí no hay quien salve. 13 Aun antes que hubiera día, yo era; y no hay quien de mi mano libre. Lo que hago yo, ¿quién lo estorbará?
Quinto: Porque no hay quien pueda Evitar que Él haga lo que quiera: Como Dios lo Confirma en Isaías cap. 46 versos 8 al 11:8 Acuérdense de esto, y tengan vergüenza; vuelvan en ustedes, prevaricadores. 9 Acuérdense de las cosas pasadas desde los tiempos antiguos; porque yo soy Dios, y no hay otro Dios, y nada hay semejante a mí, 10 que anuncio lo por venir desde el principio, y desde la antigüedad lo que aún no era hecho; que digo: Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que quiero; 11 que llamo desde el oriente al ave, y de tierra lejana al varón de mi consejo. Yo hablé, y lo haré venir; lo he pensado, y también lo haré.
Sexto: Porque Él nos da a beber del fruto de nuestros caminos: Como Dios lo Confirma en Romanos cap. 2 versos 5 al 11:5 Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios, 6 el cual pagará a cada uno conforme a sus obras: 7 vida eterna a los que, perseverando en bien hacer, buscan gloria y honra e inmortalidad, 8 pero ira y enojo a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia; 9 tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo, el judío primeramente y también el griego, 10 pero gloria y honra y paz a todo el que hace lo bueno, al judío primeramente y también al griego; 11 porque no hay acepción de personas para con Dios.
Séptimo: Porque Pronto castigará a Todo aquel que no le teme: Como Dios lo Confirma en Deuteronomio cap. 7 versos 9 y 10:9 Conoce, pues, que Jehová tu Dios es Dios, Dios fiel, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos, hasta mil generaciones; 10 y que da el pago en persona al que le aborrece, destruyéndolo; y no se demora con el que le odia, en persona le dará el pago.

En vista de todo esto:
¿Temes a Dios de esta manera que Él lo Manda? ¿Te has Humillado delante de Él, le has clamado misericordia, te has refugiado en Jesucristo, y ahora te conduces en tu diario vivir, con temor a Dios? ¿Tienes Temor al Juicio de Dios, y a su Disciplina? Si es así: ¡Gloria sean dadas a Dios, pues eres un Verdadero Discípulo o Discípula de Jesucristo! ¡Regocíjate, y Regocijémonos, Él ha tenido de nosotros misericordia!

Pero si no es así: Prepárate a recibir las Terribles consecuencias de tu actitud Temeraria, Atrevida, Irrespetuosa y Rebelde contra Dios; Oye atentamente lo que te ADVIERTE EL SEÑOR: “29 ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia? 30 Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El Señor juzgará a su pueblo. 31 ¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo! 10 y que da el pago en persona al que le aborrece, destruyéndolo; y no se demora con el que le odia, en persona le dará el pago.” dice el Señor en Hebreos cap. 10 versos 29 al 31, y en Deuteronomio cap. 7 verso 10.

28 Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con TEMOR y REVERENCIA; 29 porque nuestro DIOS ES FUEGO CONSUMIDOR.” dice el Señor en Hebreos cap. 12 versos 28 y 29.

¡Dios Espíritu Santo Aplique ésta su Divina, Poderosa e Irresistible Palabra, en cada uno de nuestros corazones! ¡Amén!

miércoles, 10 de noviembre de 2010

“20 Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto? 21 Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano.” Dice el Señor en 1ra. de Juan cap. 4 versos 20 y 21.

La esencia externa del Verdadero Cristianismo está en lo que el Señor nos dice aquí. El que no ha sido resucitado espiritualmente o nacido de nuevo, no tiene, ni capacidad para hacer esto, ni mucho menos la intención gustosa y voluntaria: “7 Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden; 8 y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios. 9 Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él.” Dice el Señor en Romanos cap. 8 versos 7 al 9.

El Verdadero Discípulo de Jesucristo Evidencia en su trato con sus hermanos en Cristo, el amor que Dios le ha derramado en su corazón: “7 Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. 8 El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor.”1ra. de Juan cap. 4 verso 7 y 8. Y este amor manifiesto, es la mas fuerte Evidencia de que el Milagro del Nuevo Nacimiento espiritual ha pasado en un ser humano, por eso se nos dice que “Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios.

Si alguien no ama a Todos sus hermanos en Jesucristo, sin importar el temperamento de cada uno, ni su condición económica, física o social, sin importar el color de su piel, o su poco gusto en el vestir, o su desconocimiento de las normas básicas para comer en una mesa; si alguien no am a Todos sus hermanos en Jesucristo, Debe Examinarse cuidadosa y detalladamente, en vista de que está Evidenciando con esta actitud que Dios Espíritu Santo no la ha hecho Nacer de nuevo, no la ha resucitado de los muertos espirituales; y por tanto, está muerta, todavía: “14 Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte.”1ra. de Juan cap. 3 verso 14.

Ahora bien, ¿Cuáles Características Externas tiene el Verdadero Amor hacia los hermanos en Jesucristo, para yo poderme Examinar si las mismas se están Evidenciando en mí?

La Primera Característica es:
Que hace estar dispuesto a Arriesgar mi Vida por el hermano en Cristo:16 En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.”dice el Señor1ra. de Juan cap. 3 verso 16.
La Segunda Característica es:
Que Ayudo en sus Necesidades Físicas a  mi hermano en Jesucristo, en la Medida de mis Posibilidades:17 Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él? 18 Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad.” dice el Señor1ra. de Juan cap. 3 verso 17 y 18.

La Tercera Característica es:
Que Amo Incondicionalmente a mi hermano en Jesucristo: “10 En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados. 11 Amados, si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros.” dice el Señor1ra. de Juan cap. 4 verso 10 y 11.

Cuando alguien, llamándose Cristiano o Cristiana, no manifiesta estas tres características en su trato con sus hermanos en Jesucristo, Evidente y Claramente, dicha persona todavía, no ha sido Resucitada espiritualmente por Dios Espíritu Santo; está muerta espiritualmente. Y Por consiguiente, No pertenece a la familia de Dios ni a su pueblo; sino mas bien, pertenece a la familia del Diablo: “10 En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios. 14 Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte.”dice el Señor1ra. de Juan cap. 3 verso 10 y 14.

De ahí se deriva que el Señor, para hacer volver en sí, y despertar de su autoengaño, al que dice que le ama y que pertenece a su pueblo, pero que en su trato con sus hermanos en Jesucristo no está Evidenciando estas características, Él le dice: Tú eres un mentiroso, ¡Reacciona! ¡Despierta! ¿No te das cuentas que “el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto”? ¿No te das cuentas que si esas Características no están en ti, Evidencias, que tampoco me amas a Mí? ¿Si no puedes amar conforme a estas tres características a tu hermano que ven tus ojos físicos, cómo puedes decirme que me amas a Mí, a quien tus ojos nunca han visto? ¡Mentiroso, Mentirosa! ¡Hipócrita! Arrepiéntete de esta tu maldad, y de este Grave Pecado, no sea que Me enoje, y Perezcas en el camino: “11 Servid a Jehová con temor, Y alegraos con temblor. 12 Honrad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino; Pues se inflama de pronto su ira.  Bienaventurados todos los que en él confían. ” Salmos cap. 2 versos 11 y 12.

Por consiguiente, hoy Dios nos Manda, a que Examinemos:
Primero: ¿Cuál es el tipo de Amor que estoy manifestando hacia mis hermanos en Jesucristo?
Y, Segundo: Si ese Amor está Evidenciando estas Tres Características que Él exige.

Si resulta que mi Amor Externo y Manifiesto, es así, como Dios Manda, “el que ama a Dios, ame también a su hermano”:
Debo de Regocijarme, pues estoy Evidenciando que, real y verdaderamente, Amo a Dios; y que Dios Espíritu Santo ha hecho de mí una Nueva Criatura, un Nuevo ser humano, capaz de amar a sus hermanos en Jesucristo, aunque ponga su propia vida en riesgo, supliéndoles sus necesidades de acuerdo a sus fuerzas y amándoles incondicionalmente.

Pero si mi Amor Externo y Manifiesto, No es así:
Debo Temer al Juicio de Dios que caerá sobre mí, si no abandono esa actitud Mentirosa, Hipócrita y Rebelde delante delante de Él; me Humillo ante Su presencia, le Clamo Misericordia, y me Refugio en Jesucristo, mediante la Fe en Él, y el Arrepentimiento de mis Pecados: “16 Pero al malo dijo Dios: ¿Qué tienes tú que hablar de mis leyes, Y que tomar mi pacto en tu boca? 17 Pues tú aborreces la corrección, Y echas a tu espalda mis palabras. 18 Si veías al ladrón, tú corrías con él, Y con los adúlteros era tu parte. 19 Tu boca metías en mal, Y tu lengua componía engaño. 20 Tomabas asiento, y hablabas contra tu hermano; Contra el hijo de tu madre ponías infamia. 21 Estas cosas hiciste, y yo he callado; Pensabas que de cierto sería yo como tú; Pero te reprenderé, y las pondré delante de tus ojos. ” dice el Señor en Salmos cap. 50 versos 16 al 21.
¡Que Dios Bendiga ésta su Palabra, y la Haga Germinar en cada uno de nuestros corazones! ¡Amén!

sábado, 16 de octubre de 2010

“40 Vino a Él un leproso, rogándole; e hincada la rodilla, le dijo: Si quieres, puedes limpiarme. 41 Y Jesús, teniendo misericordia de él, extendió la mano y le tocó, y le dijo: Quiero, sé limpio. 42 Y así que Él hubo hablado, al instante la lepra se fue de aquél, y quedó limpio. 45 Pero ido él, comenzó a publicarlo mucho y a divulgar el hecho, de manera que ya Jesús no podía entrar abiertamente en la ciudad, sino que se quedaba fuera en los lugares desiertos; y venían a Él de todas partes.” Dice el Señor en Marcos cap. 1 versos 40 al 42 y 45.

En este hecho histórico y maravilloso, Dios, el Alto y Sublime, El que hace todo lo que quiere, en cielo, en la tierra y en todos los abismos; Aquel, que no hay quien le detenga la mano, y le diga qué haces, nos Enseña lo siguiente:

Primero: Que Él sólo tiene misericordia de aquel ser humano pecador que está consciente de su Penoso y Condenable estado en el que se Encuentra: “Vino a Él un leproso…”.

Esta persona debió primero de estar consciente de que era Leproso; de que era una persona en una Condición Deprimente y Penosa; una persona cuyo cuerpo cada día se iba destruyendo, por causa de su terrible condición de Leproso.

Y fue, el estar convencido de esto, que lo llevó a Implorar la misericordia de Dios, de que Su poder, fuera usado a su favor.

Y es esa misma Convicción o Convencimiento que Debes tener tú, si quieres que Dios tenga Misericordia de ti:
ü Debes estar Convencido que eres Leproso, pero en tu alma; que tu alma está llena de llagas o cortaduras podridas, por causa de tus pecados o Transgresiones a las Leyes de Dios.” 15 Todas las cosas son puras para los puros, mas para los corrompidos e incrédulos nada les es puro; pues hasta su mente y su conciencia están corrompidas.” Dice el señor en Tito cap. 1 verso 15.
Debes estar Convencido que te encuentras en una Condenable situación, por tu estado de Pecador No Transformado por Dios Espíritu Santo; y que por tanto, la Ira y el Juicio de Dios Pesan sobre ti: “11 Dios es juez justo, Y Dios está airado contra el impío todos los días.” dice el Señor en Salmos 7 verso 11.
ü Debes estar Convencido que No eres bueno delante de las Exigencias de Dios en Su Ley; y que por tanto, apareces como un Transgresor y Rebelde ante Su presencia: “10 Porque cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere en un punto, se hace culpable de todos. 11 Porque el que dijo: No cometerás adulterio, también ha dicho: No matarás. Ahora bien, si no cometes adulterio, pero matas, ya te has hecho transgresor de la ley.” dice el Señor en Santiago cap. 2 verso 10 y 11
ü Debes estar Convencido que Necesita Solucionar esta situación en la cual te encuentras.

Pero, Dios también nos Enseña en Segundo Lugar: Que Sólo a Él Debemos Acudir para ser Librado del Penoso y Condenable estado en que por naturaleza, nos encontramos: “Vino a Él… Y Jesús…”.

Cuando Dios nos trae el Convencimiento de nuestro triste estado delante de Él, No debemos acudir a medios humanos para poder solucionar esta situación; No. No debemos acudir a un llamado sacerdote, ni a un pastor, ni cuadro de un del corazón de un supuesto Jesús, Ni a un crucifijo, Ni mucho menos a la imagen Visual Inventada de Jesucristo que vender por doquier, y que te la envían a un por correo en la internet; No.

Debemos acudir al Verdadero Jesús; Aquel, que se revela en la Santísima Biblia como un ser “ Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.” dice el Señor en Isaías 9 verso 6. Aquel que es Todopoderoso para salvar de la Condenación en el Infierno, y en esta vida, de la esclavitud del pecado, a todo ser humano, que por medio de la Fe Salvadora y el Arrepentimiento de sus pecados, se Ampara en Él: “14 Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión. 16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.” dice el Señor en Hebreos cap. 4 versos 14 y 16.

Debes acudir al Señor Jesucristo, el cual como Dios el Hijo, es el Único que puede mediar ante Dios el Padre, y Evitar así, ser condenados Eternamente en el Infierno o Lago de Fuego y Azufre: “5 Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre.9 y habiendo sido perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen” dice el Señor en 1ra. a Timoteo cap. 2 verso 5, y en Hebreos cap. 5 verso 9.

Debes al igual que el hermano rey David en Samos 32  verso 5 Confesarle tus pecados al mismo Dios, y No a mas nadie: “5 Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado.

Acuérdate, que si este Leproso no acude al que tenía en poder para sanarle, no solo no hubiese sido sanado, sino también, que hubiese muerto leproso. Así mismo pasa contigo, si no Acudes cuanto antes al Señor Jesucristo, y sólo a Él, no sólo seguirás Leproso en tu alma, lleno de pecados; sino también, que terminarás condenado eternamente y para siempre, sin esperanza alguna. El Único Vicario, Intercesor o Mediador: Nuestro Bendito, Maravilloso, Eterno y Glorioso: Señor Jesucristo: “11 Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo. 12 Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.” dice el Señor en Hechos cap. 4 versos 11 y 12.

Pero, Dios también nos Enseña en Tercer Lugar: Que la Actitud correcta para alcanzar Su misericordia es ir con Ruegos y Suplicas delante de Él:Vino a Él un leproso, rogándole; e hincada la rodilla…”.

Luego que se es consciente del Penoso y Condenable estado en que uno se encuentra delante de Dios, y que se sabe que Sólo a Dios hay que acudir, el paso siguiente es: Venir con una Actitud de Ruego y Suplica, es decir, una actitud de humildad y humillación. Si se ha de alcanzar el favor del Altísimo, hay que acudir a Él, con ruegos, suplicas e hincada la rodilla.

Hay que despojarse de todo Orgullo, Soberbia y Pretensión. Hay que Venir a Pedir que por favor, que si Él quiere, Incline su Brazo de Misericordia y nos libre de ese Penoso estado en que nos encontramos; hay que tomar en sus labios palabras iguales o similares a la que dijo el hermano, el rey David: “1 Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones. ” en Salmos 51 verso 1.

Por eso dice el Señor en Isaías cap. 66 versos 1 y 2: “1 Jehová dijo así: El cielo es mi trono, y la tierra estrado de mis pies; ¿dónde está la casa que me habréis de edificar, y dónde el lugar de mi reposo? 2 Mi mano hizo todas estas cosas, y así todas estas cosas fueron, dice Jehová; pero miraré a aquel que es pobre y humilde de espíritu, y que tiembla a mi palabra.”.

En Cuarto Lugar, Dios nos Enseña: Que de Él es quien depende Tener misericordia o no de un ser humano pecador:Y Jesús, teniendo misericordia de él, extendió la mano y le tocó, y le dijo: Quiero, sé limpio.

Luego de  Sentirnos Leprosos por nuestros pecados delante de Dios; Luego de Saber que Sólo Jesucristo nos Puede librar y perdonar; Luego de Acudir a Él con Ruegos y Suplicas; Debo estar Consciente que de Dios es quien Depende mostrar su Brazo de misericordia para conmigo; que de Él depende extender su Mano Todopoderosa, Justa, Tierna y Cariñosa, y mostrar en mi su misericordia salvadora, y Pronunciar las Mejores palabras que se puedan pronunciar sobre la Tierra, a un ser perdido y pecador, como lo somos todos por naturaleza: “Quiero, sé limpio.

Es en ese Querer de Dios que Debe estar la esperanza mía como pecador; ese debe ser mi apoyo. Es procurando sacar de Dios ese “Quiero, sé limpio” que Debe estar concentrado todo mi esfuerzo.

Y Él, es tan misericordioso, compasivo y bondadoso, que me ha revelado y mostrado cómo sacar de Él ese “Quiero, sé limpio”. ¿Cómo? Estando consciente de mi Penoso y Condenable estado delante de Él; Acudiendo al Señor Jesucristo, como Único Mediador; y Llevando una Actitud de Ruegos y suplicas; he aquí las claves para sacar ese Querer de Dios, o mejor dicho, para sacar de Dios, ese Querer Tener de mí, Misericordia.

En Quinto Lugar, Dios nos Enseña: Que Cuando El Transforma a un ser humano Pecador, lo hace de forma Instantánea e Inmediata:Y así que Él hubo hablado, al instante la lepra se fue de aquél, y quedó limpio.

En el mismo momento que un pecador Clama Misericordia a Dios, como Resultado de la Resurrección espiritual operada en su alma por Dios Espíritu Santo, Convencido de que ha Ofendido a un Dios Justísimo, Purísimo y Santísimo, Dios Inmediatamente  lo Transforma y hace del mismo un nuevo ser humano: “17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.” dice el Señor en 2da. a los Corintios cap. 5 verso 17.

Dios, al Transformar a un ser humano pecador hace dos cosas con él:
La primera Cosa: Le Declara sin Pecados y Justo delante de su Tribunal, basado en la Obediencia Perfecta del Señor Jesucristo a todas las Exigencias de la ley de Dios, y su Valiosa Muerte en la Cruz: “1 Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo; 2 por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios. 10 Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida. 11 Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en Dios por el Señor nuestro Jesucristo, por quien hemos recibido ahora la reconciliación. 19 Porque así como por la desobediencia de un hombre los muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, los muchos serán constituidos justos. 1 Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.” dice el Señor en Romanos cap. 5 versos 1, 2, 10, 11 y 19; y cap. 8 verso 1.

La Segunda Cosa: Hace Morar a Dios Espíritu Santo dentro de éste, de modo, que el poder esclavizante que tenía su naturaleza pecaminosa sobre él es eliminado, y ahora, tiene la capacidad de Obedecer a Dios, y Hacer su voluntad, no de una manera perfecta, pero cada día que pasa se va acercando mas y mas, a dicha perfección: “17 Pero gracias a Dios, que aunque erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a aquella forma de doctrina a la cual fuisteis entregados; 18 y libertados del pecado, vinisteis a ser siervos de la justicia. 22 Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna. 9 Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él. 11 Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros. 13 porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis. 14 Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios. 15 Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre!” dice el Señor en Romanos cap. 6 versos 17, 18 y 22; y Romanos cap. 8 verso 9, 11, 13 al 15.

En Sexto Lugar, Dios nos Enseña: Que Todo ser humano Transformado por Dios le Predica a otros cómo Dios le Transformó:Pero ido él, comenzó a publicarlo mucho y a divulgar el hecho…”.

Cuando un ser humano ha sido recipiente de la misericordia de Dios éste No Puede Contenerse de Anunciarles a otros, el Gran Milagro que Dios ha hecho en su vida; tiene que publicarlo. El quiere que todos se enteren de lo Misericordioso que ha sido Dios con Él; de cómo le libró de la Esclavitud de sus pecados, y de la Condenación en el Infierno Eterno o Lago de fuego y Azufre.

El, al igual que el leproso de nuestra historia, comienza “a publicarlo mucho y a divulgar el hecho”. No hay vecino que no se entere lo que Dios hizo con él; no hay compañero de trabajo al que él no se lo diga; él quiere divulgarlo donde quiera que se encuentre.

Así como si una persona mendiga y muy pobre, recibe, gratuitamente, una herencia millonaria, no hay persona que éste conozca que no se lo comunique. De la misma manera, Cuando una persona ha sido Transformada por Dios Espíritu Santo, y Éste ha venido a morar dentro de ella, la misma se lo comunica a todos por doquier, con alegría, orgullo y agradecimiento; pero a la vez, con la sagrada intención de que Dios haga lo mismo con la otra persona a si como hizo con ella.

Tú, que dices ser Cristiano, Cristiana o Discípulo de Jesucristo:

¿Saben tus familiares, Vecinos, Compañeros de trabajo o de estudios, y las personas con las que te interrelacionas lo que Dios ha hecho contigo? ¿Le Predicas el Evangelio de Jesucristo para que Dios haga en ellos lo que hizo contigo? O ¿Es que acaso eres un Simulador e Hipócrita? ¿Sólo te dices de Jesucristo cuando estás en el local de la iglesia? ¿No te Reprende y Acusa tu conciencia? Como únicamente sirves de obstáculo para el Evangelio de Jesucristo, Oye bien lo que te dice el Gran Señor: “16 Pero al malo dijo Dios: ¿Qué tienes tú que hablar de mis leyes, Y que tomar mi pacto en tu boca? 17 Pues tú aborreces la corrección, Y echas a tu espalda mis palabras. 18 Si veías al ladrón, tú corrías con él, Y con los adúlteros era tu parte. 19 Tu boca metías en mal, Y tu lengua componía engaño. 20 Tomabas asiento, y hablabas contra tu hermano; Contra el hijo de tu madre ponías infamia. 21 Estas cosas hiciste, y yo he callado; Pensabas que de cierto sería yo como tú; Pero te reprenderé, y las pondré delante de tus ojos.” Salmos cap. 50 versos 16 al 21.

Pero para ti que te ves y te sientes Leproso por tus pecados:

¡Ven, Acude al Divino Señor Jesucristo! ¡Ven, Convencido de que estás leproso en tu alma por tus pecados! ¡Ven, Convencido que Sólo Jesucristo te Puede librar de tu Penosa y Condenable situación! ¡Ven, con palabras de Ruegos y Suplicas, y Clámale que te perdones por todos tus pecados! ¡Ven, y Pídele al Señor de toda misericordia, que si Él quiere, tenga de ti misericordia! ¡Ven, ven a Jesucristo, por medio de la fe, en oración! ¡Ven, que lo más seguro que hará contigo como hizo al leproso de nuestra historia, te dirá: “Quiero, sé limpio.

Que este día sea el Gran día en que Dios limpie tu alma de todo pecado, te liberte de la esclavitud de tu naturaleza pecaminosa, te haga obedecerle, y te libre de la Terrible condenación en el Infierno Eterno o Lago de fuego y azufre.

Y a ti, que al igual que a mí, el Señor Jesucristo ha limpia nuestras almas de la Lepra de nuestros pecados:

28 Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia; 29 porque nuestro Dios es fuego consumidor.” dice el Señor en Hebreos cap. 12 verso 28 y  29.

¡Dios bendiga ésta, su Bendita, Maravillosa y Gloriosa Palabra en cada uno de nuestros corazones! ¡Amén!