miércoles, 10 de noviembre de 2010

“20 Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto? 21 Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano.” Dice el Señor en 1ra. de Juan cap. 4 versos 20 y 21.

La esencia externa del Verdadero Cristianismo está en lo que el Señor nos dice aquí. El que no ha sido resucitado espiritualmente o nacido de nuevo, no tiene, ni capacidad para hacer esto, ni mucho menos la intención gustosa y voluntaria: “7 Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden; 8 y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios. 9 Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él.” Dice el Señor en Romanos cap. 8 versos 7 al 9.

El Verdadero Discípulo de Jesucristo Evidencia en su trato con sus hermanos en Cristo, el amor que Dios le ha derramado en su corazón: “7 Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. 8 El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor.”1ra. de Juan cap. 4 verso 7 y 8. Y este amor manifiesto, es la mas fuerte Evidencia de que el Milagro del Nuevo Nacimiento espiritual ha pasado en un ser humano, por eso se nos dice que “Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios.

Si alguien no ama a Todos sus hermanos en Jesucristo, sin importar el temperamento de cada uno, ni su condición económica, física o social, sin importar el color de su piel, o su poco gusto en el vestir, o su desconocimiento de las normas básicas para comer en una mesa; si alguien no am a Todos sus hermanos en Jesucristo, Debe Examinarse cuidadosa y detalladamente, en vista de que está Evidenciando con esta actitud que Dios Espíritu Santo no la ha hecho Nacer de nuevo, no la ha resucitado de los muertos espirituales; y por tanto, está muerta, todavía: “14 Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte.”1ra. de Juan cap. 3 verso 14.

Ahora bien, ¿Cuáles Características Externas tiene el Verdadero Amor hacia los hermanos en Jesucristo, para yo poderme Examinar si las mismas se están Evidenciando en mí?

La Primera Característica es:
Que hace estar dispuesto a Arriesgar mi Vida por el hermano en Cristo:16 En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.”dice el Señor1ra. de Juan cap. 3 verso 16.
La Segunda Característica es:
Que Ayudo en sus Necesidades Físicas a  mi hermano en Jesucristo, en la Medida de mis Posibilidades:17 Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él? 18 Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad.” dice el Señor1ra. de Juan cap. 3 verso 17 y 18.

La Tercera Característica es:
Que Amo Incondicionalmente a mi hermano en Jesucristo: “10 En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados. 11 Amados, si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros.” dice el Señor1ra. de Juan cap. 4 verso 10 y 11.

Cuando alguien, llamándose Cristiano o Cristiana, no manifiesta estas tres características en su trato con sus hermanos en Jesucristo, Evidente y Claramente, dicha persona todavía, no ha sido Resucitada espiritualmente por Dios Espíritu Santo; está muerta espiritualmente. Y Por consiguiente, No pertenece a la familia de Dios ni a su pueblo; sino mas bien, pertenece a la familia del Diablo: “10 En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios. 14 Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte.”dice el Señor1ra. de Juan cap. 3 verso 10 y 14.

De ahí se deriva que el Señor, para hacer volver en sí, y despertar de su autoengaño, al que dice que le ama y que pertenece a su pueblo, pero que en su trato con sus hermanos en Jesucristo no está Evidenciando estas características, Él le dice: Tú eres un mentiroso, ¡Reacciona! ¡Despierta! ¿No te das cuentas que “el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto”? ¿No te das cuentas que si esas Características no están en ti, Evidencias, que tampoco me amas a Mí? ¿Si no puedes amar conforme a estas tres características a tu hermano que ven tus ojos físicos, cómo puedes decirme que me amas a Mí, a quien tus ojos nunca han visto? ¡Mentiroso, Mentirosa! ¡Hipócrita! Arrepiéntete de esta tu maldad, y de este Grave Pecado, no sea que Me enoje, y Perezcas en el camino: “11 Servid a Jehová con temor, Y alegraos con temblor. 12 Honrad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino; Pues se inflama de pronto su ira.  Bienaventurados todos los que en él confían. ” Salmos cap. 2 versos 11 y 12.

Por consiguiente, hoy Dios nos Manda, a que Examinemos:
Primero: ¿Cuál es el tipo de Amor que estoy manifestando hacia mis hermanos en Jesucristo?
Y, Segundo: Si ese Amor está Evidenciando estas Tres Características que Él exige.

Si resulta que mi Amor Externo y Manifiesto, es así, como Dios Manda, “el que ama a Dios, ame también a su hermano”:
Debo de Regocijarme, pues estoy Evidenciando que, real y verdaderamente, Amo a Dios; y que Dios Espíritu Santo ha hecho de mí una Nueva Criatura, un Nuevo ser humano, capaz de amar a sus hermanos en Jesucristo, aunque ponga su propia vida en riesgo, supliéndoles sus necesidades de acuerdo a sus fuerzas y amándoles incondicionalmente.

Pero si mi Amor Externo y Manifiesto, No es así:
Debo Temer al Juicio de Dios que caerá sobre mí, si no abandono esa actitud Mentirosa, Hipócrita y Rebelde delante delante de Él; me Humillo ante Su presencia, le Clamo Misericordia, y me Refugio en Jesucristo, mediante la Fe en Él, y el Arrepentimiento de mis Pecados: “16 Pero al malo dijo Dios: ¿Qué tienes tú que hablar de mis leyes, Y que tomar mi pacto en tu boca? 17 Pues tú aborreces la corrección, Y echas a tu espalda mis palabras. 18 Si veías al ladrón, tú corrías con él, Y con los adúlteros era tu parte. 19 Tu boca metías en mal, Y tu lengua componía engaño. 20 Tomabas asiento, y hablabas contra tu hermano; Contra el hijo de tu madre ponías infamia. 21 Estas cosas hiciste, y yo he callado; Pensabas que de cierto sería yo como tú; Pero te reprenderé, y las pondré delante de tus ojos. ” dice el Señor en Salmos cap. 50 versos 16 al 21.
¡Que Dios Bendiga ésta su Palabra, y la Haga Germinar en cada uno de nuestros corazones! ¡Amén!